Un seguro veterinario implica el pago de primas regulares y reembolsos de gastos veterinarios para tu mascota, similar a un seguro de salud. Por otro lado, un servicio de asistencia veterinaria requiere una tarifa de membresía (también mensual) que proporciona recursos y descuentos en una variedad de servicios veterinarios, abonándolos conforme se van consumiendo. En el primero es la empresa aseguradora quien revisa los siniestros solicitados y procede al reembolso. En este caso el servicio se realiza directamente y es la clínica quien se encarga de todo.

De esta forma, vosotros como veterinarios podéis comercializar este servicio directamente en la clínica, sin necesidad de realizar cursos de formación sobre seguros ni tener aprobados una serie de trámites necesarios en el sector asegurador.

Muy sencillo. Desde esta misma página web puedes proporcionarnos los datos de tu clínica. Antes de poder aprobarte el perfil y que comiences a comercializar este servicio con tus pacientes, te llamaremos y agendaremos una reunión de formación, explicándote personalmente todos los beneficios de implantar este modelo de negocio en tu clínica.

Una vez aprobado tu perfil, tendrás acceso a tu área privada, donde podrás dar de alta a tus pacientes que soliciten el servicio, teniendo ellos que firmar el acuerdo y realizar el pago del mismo.

El tutor de la mascota tiene que acudir a tu centro y será la propia clínica quien le diga si la visita está cubierta dentro de este servicio o no.

Tras la formación que realizamos, la mayoría de casos se puede saber al momento si aplica o no, pero si existiesen dudas, puedes llamar al teléfono que hemos habilitado exclusivamente para veterinarios, y consultar en el momento tus dudas. Es un servicio disponible 24/7 los 365 días del año.

Los servicios preventivos (consulta, vacunas y desparasitaciones) no se le cobra nada al cliente. Siempre que no haya consumido aún ese servicio en el año en curso.

En el caso de los servicios por enfermedad o accidente, el 20% de la factura se le cobra al cliente (co-pago) en el momento del servicio. El 80% restante se le pagará a la clínica el día 7 de cada mes.

Tienes dos formas de resolver este problema en el momento.

Una es entrando en el perfil de tu cliente y revisar si está al corriente de pagos y cuenta con saldo disponible para el importe de la factura que vas a tener que cobrarle.

Otra es llamando al teléfono de contacto exclusivo para veterinarios y disponible 24/7 los 365 días del año, donde podrás contarnos la casuística y así comunicarte al momento si está cubierta o no para el paciente.

Accediendo al área privada de tu clínica y consultando la ficha de tus pacientes. Aquí podrás ver si está al corriente de sus pagos mensuales, los servicios que ya ha consumido para el año en curso y el saldo disponible por accidente o enfermedad.

En principio el servicio de asistencia está pensado para utilizarse en la propia clínica. Sin embargo, existe la posibilidad de realizarlo en otra clínica. El cliente deberá solicitar a la clínica que contacte con vosotros para acordar la realización del servicio pero cobrándole sólo al cliente el 20% del servicio. El 80% restante os tendría que enviar la factura y el informe, para que así vosotros lo subáis a vuestro área privada, como si de un servicio vuestro se tratase. En el momento de cobro del 80% el día 7 del mes, se lo enviais a la clínica que prestó el servicio y así quedaría cubierta la asistencia en otras ubicaciones.

No. El precio es independiente del número de mascotas con las que se contrate el servicio.

En los siguientes casos:

• Animales que se usan para la caza
• Falta de microchip o no coincidente con el que figura en la documentación del animal.Omisión voluntaria o falsedad en las declaraciones previas al contrato
  Animales con declaración o sospecha de rabia.

• Enfermedades o lesiones preexistentes
• Intervenciones quirúrgicas estéticas
• Cesárea o parto distócico en razas braquicéfalas
• No incluye medicamentos preventivos (sí incluye medicamentos recetados, aplicados y cedidos en consulta).
• Gastos de atención veterinaria para animales sanos, salvo los ya incluidos en este servicio.
• Intervenciones quirúrgicas y tratamientos relacionados con la displasia de cadera en Pastor alemán, Labrador y Golden retriever.
• Enfermedades infecciosas sin vacunación adecuada, incluida en este plan. En perros: rabia, moquillo, hepatitis, parvovirosis y tos de las perreras. En gatos: rabia, panleucopenia, herpes virus, calicivirus. Quiere decir que si coges una infección para lo que supuestamente está vacunado la mascota, no se cubre en el servicio de asistencia.
• Tratamiento de alteraciones de comportamiento.
• Enfermedades hereditarias o congénitas no conocidas previamente.
• La cirugía de trasplante, y los derivados de la implantación sustitución o extracción de prótesis, ortésis y material de osteosíntesis.
• Esterilización o castración sin patologías asociadas siempre que dicha patología no esté relacionada con los órganos reproductores. Ejemplo: cáncer de testículos, piómetra, etc
• Gastos de alimentación, complementos dietéticos y productos de higiene.
• Compensación económica por la muerte del animal.
• Atención no realizada por veterinarios colegiados, o sus auxiliares.
• Gastos que excedan el alcance y compensación económica del contrato.
• Gastos derivados de enfermedades o lesiones causadas intencionalmente por el propietario o cualquier persona bajo su responsabilidad.
• Accidentes o lesiones causadas durante la participación en actividades deportivas de competición como por ejemplo agility, trineos, carreras, etc..
• Gastos derivados de accidentes o lesiones causadas durante la participación en actividades delictivas y/o peligrosas (labores de seguridad, vigilancia, rescate, caza,etc..)
• Gastos derivados de enfermedades o lesiones causadas por negligencia o falta de cuidado por parte del propietario.
• Gastos derivados de enfermedades o lesiones causadas por la reproducción no controlada del animal.
• Gastos derivados de enfermedades o lesiones causadas por la falta de cuidado dental adecuado.
• Gastos derivados de enfermedades o lesiones causadas por el contacto con sustancias o productos no adquiridos en establecimientos autorizados y/o no utilizados siguiendo las instrucciones del fabricante o del veterinario.
• Prestaciones veterinarias no relacionadas con el sacrificio del animal en los supuestos de eutanasia acordada entre el propietario de la mascota y el veterinario como la mejor opción desde el punto de vista veterinario.